La terraza para desayunar es espectacular, pero la calle puede ser un poco intimidante de noche.

Un desayuno en la terraza inolvidable

Disfrutamos de un desayuno excepcional en la terraza, rodeados de vistas impresionantes y un ambiente tranquilo. La cercanía al metro facilitó nuestras excursiones por la ciudad.

Sin embargo, el acceso al lugar puede ser complicado ya que no hay ascensor en el edificio, lo que puede ser un desafío si llevas muchas maletas.

la terraza para el desayuno es estupenda y acogedora ☀️, con vistas encantadoras. además, el anfitrión es muy amable y te ayuda con información para explorar la ciudad, un verdadero plus para disfrutar al máximo.

la calle es un poco oscura a veces 🌙.

una experiencia inolvidable en napoles, un anfitrión amable y una terraza de ensueño

El Bed And Breakfast I Vicoletti Di Napoli fue una joya oculta en mi viaje. La terraza donde desayunamos por la mañana era simplemente espectacular, una delicia sentarse allí y disfrutar de la vista. Además, la cama era súper cómoda y el lugar estaba impecablemente limpio. La ubicación estratégica nos permitió explorar todos los rincones de Nápoles a pie. Gabriel, nuestro anfitrión, fue extremadamente amable y siempre dispuesto a darnos consejos y recomendaciones. Sin duda, una estancia que atesoraré.

Terraza espectacular para desayunos tranquilos.

Ubicación excelente, justo en el centro para pasear a gusto. Habitación limpia y acogedora, con una terraza divina para desayunar. Trato muy amable por parte del personal, siempre dispuestos a ayudar. Eso sí, se siente un poco de ruido en la noche, pero nada del otro mundo.

La terraza para el desayuno ofrece vistas espectaculares que son difíciles de superar. La decoración antigua dentro del lugar agrega un ambiente acogedor que hace sentir como en casa, además las habitaciones son muy cómodas.

El acceso al lugar puede ser complicado y las calles cercanas tienen un ambiente un poco intimidante, especialmente de noche. Aunque por dentro es un refugio, la dificultad para encontrarlo puede resultar frustrante para algunos. La limpieza es buena, pero el ruido de las calles puede ser un inconveniente si buscas tranquilidad absoluta.

Qué delicia de cafés en Caffe Mexico y helados por los alrededores! Cada bocado se siente como un abrazo de Nápoles. Además, la amplitud de la habitación y esa terraza al aire libre son perfectas para relajarse. Te sientes en casa y el balcón es un extra que no se puede dejar pasar.

Claro, está en el cuarto piso y no hay ascensor, pero eso no fue nada que arruinara nuestra experiencia. ¡Subir las escaleras al final de un día explorando Nápoles también tiene su encanto!

La habitación era muy cómoda y amplia. Tenía un baño privado completo y accesorios como secador y armarios, lo cual fue genial. La decoración antigua le daba un toque acogedor. El balcón fue un plus, perfecto para relajarse. Sin embargo, la calle puede ser un poco intimidante de noche y se oye algo de ruido afuera, aunque eso no arruinó la experiencia.